Capítulo 52

Gustavo descarga su ira por todo lo que ha descubierto lanzado todo por los aires. El estruendo es muy fuerte. Tanto los gemelos como Ana están muy preocupados. Camilo quiere entrar pero Víctor le dice que mejor no:

--Es mejor que lo dejemos solos.

Luego mira a Raúl

--¡¡a quien tenemos que echar es a este desgraciado.¡

Camilo y Víctor unidos como siempre en contra de ese hombre que ha desestabilizado su familia.

--¡¡Fuera.¡

Además que miran con reproche a su madre. Ana está harta de que todos la vean ahora como la mala y se defiende:

--¡¡no sean hipócritas.¡ ¿¿porque a su padre le aplauden sus cochinadas y a mi me juzgan¡? ¡¡yo he sido siempre una víctima de su padre¡¡ 

Pero ni Camilo ni Víctor quieren escucharla. Cada uno agarran a Raúl de un brazo y lo quieren arrastrar a la salida.

--¡¡Raúl es mi invitado.¡ ¡¡Raúl se queda conmigo.¡ --dice Ana.

Víctor y Camilo miran a su madre molestos y les dice:

--entonces no nos busques.

Y se van. A Ana le duele mucho que sus 3 hijos que tiene más cerca (Francisco es como si no estuviera) la rechacen. Abraza a Raúl llorando.

--¿¿porque no me entienden?

Raúl les seca las lagrimas:

--A mi me ha dado mucha pena hacer eso a esos chicos.

--Son tus hijos.

--Lo sé pero se aman. --Raúl triste.

Ana seca las lagrimas de él. No cree en ese amor:

--se les pasara. Gustavo siempre ha sido muy alocado. Sólo le ha importado el sexo. no puede estar muy enamorado.

Carmen ha quedado con su cuñado en una cafetería cercana a la casa de esta.

--¿¿qué paso? Me asustaste.

--¿tú sabías que Gustavo no es hijo mío?

Carmen mira a su cuñado sorprendido:

--¿¿de dónde has sacado esa locura?

--Me lo ha dicho tu hermana. En un momento en el que creía que yo la engañaba tuvo un romance con. --le da rabia decirlo-- Con Raúl.

--¿¿qué Raúl?

Carmen no puede creer que su hermana haya tenido un hijo con el hombre que después desgració la vida de su hija.

--Ese mismo Raúl.

El rostro de Carmen se llena de odio. 

--¡¡ese hombre.maldita sea.¡

Eugenio llora.

--Yo estoy muy mal. Es mi hijo y ahora resulta que se enamoró de su hermano.

Carmen le pone la mano en los hombros. Él la mira lloroso.

--no se donde ir.

--Puedes quedarte conmigo.

--¿y tu marido?

--el a veces ni llega y si llega es de madrugada. borracho. Ni se enterará.

Eugenio necesita descargarse y Carmen es la ideal. Si su mujer se acostó con su hermano porque no hacerlo él con su hermana. Ella no quiere caer en el juego de provocaciones de él. De su mirada sensual pero cae a la primera caricia.  Eugenio sabe cómo hacer sentir el calor de un hombre que tantos años hace Carmen que no tiene y que tanto necesita.

Gustavo se retuerce en el piso llora desconsolado. Ignacio esta en un rincón. No sabe qué hacer. Él se siente igual. A Gustavo le da igual que su madre se haya acostado con Raúl. Eso no le duele. No entiende porque a él le ha tenido que pasar esto.

--¿¿porque tengo que ser yo el hijo de ese desgraciado.? ¿porque precisamente yo.?

Con la voz rota, Ignacio dice:

--somos hermanos. tienes que asumirlo.

Gustavo da un puñetazo en el piso tan fuerte que Ignacio teme que se haya lastimado. Gustavo se levanta herido de alma.

--¡¡no lo acepto. ¡¡no lo acepto¡¡

--Cuanto más tardemos en asumirlo más daño nos haremos.

Gustavo se acerca a Ignacio. Lo abraza. 

--Mírame a los ojos y dime que no me amas.

Ignacio vibra en sus brazos. Llora. Casi se cae. Gustavo lo ayuda a sentarse al sofá.

--perdóname. perdóname por ser tan brusco.

En el sofá los dos se abrazan. Lloran. Se quedan un buen rato así. En silencio. Unidos por el dolor. Por una realidad que ha resultado una pesadilla y que ninguno de los dos quiere aceptar

A fuera Ana sigue con Raúl.

--bueno. yo me voy.

--No, no te tienes porque ir. 

--No quiero provocar a tus hijos.

--Pues llévame contigo.

Raúl la mira sorprendido:

--¿hablas en serio?

--Mis hijos creen que su padre es libre de hacer lo que quiera y yo no. Ya estoy harta. contigo viví unos días bonitos. Pese a que luego me arrepentí sí es cierto me podría haber enamorado de ti. Estoy segura que si hubiera dejado a Eugenio habría acabado siendo feliz a tu lado.

Raúl le acaricia el pelo:

--Se que cometí errores.

--Me dolió mucho lo que le hiciste a Andreita.

--No soy un crápula. Ella fue la que insistió.

Ana mira a ese hombre con reproche:

--No debimos sacar este tema. No creo que mi sobrina te sedujera. ¿o me vas a negar que fuiste el primero?

Raúl agacha la cabeza con pena.

--no hablemos del pasado. cometí errores. todos lo hicimos. Mi vida fracaso. Me casé, me divorcie en varias ocasiones y es que en cada mujer te buscaba a ti.

Ana se emociona y lo abraza. 

--debí aceptar tu propuesta irme contigo.

Se miran con ternura:

--me quisiste o fue solo porque creías que tu marido te engañaba.?

--sabes que te quise. No te amé pero te quise mucho.

--La nuestra fue una historia de amor interrumpida. Pesó más tus hijos. un amor antiguo.

--A Eugenio lo voy a amar toda la vida. lo nuestro fue un sueño que quise vivir pero nunca me anime.

Ese hombre le atrae y además esta muy herida. Se lanza en sus brazos. Va con él al hotel. Pasan toda la noche juntos.