Rosana esta frente a frente a los dos hombres que más ha querido y ahora le falta: los dos Jorge. Le duele el odio con el que la mira su esposo. Mira entre lágrimas al pequeño que está en brazos del tío. Quiere acariciarlo pero Jorge se adelanta y le dice:
--¡no te acerques a mi hijo¡
Rosana está rota del dolor. Jorge ordena a su hermano que se meta en auto con el niño. Rosana mira al bebe con cariño, con tristeza. Llora. Eugenio la sonríe con pena. Jorge no tiene compasión con su esposa.
--¿¿qué haces aquí?¡
--Quiero ver a mi hijo.
Jorge la agarra del brazo y la va alejando del auto:
--No es tu hijo y ya lo viste. ¡¡vete¡
--déjame darle un beso. --le suplica.
--¡¡no lo verás mas¡
Ya que por las buenas no logra nada, Rosana se lo exige:
--¡¡¡tengo mis derechos.¡¡
Jorge estalla:
--¡¡¡¡desde la cárcel no los podrás ejercer. ¡ ¡¡¡Esos son tus únicos derechos.¡¡ Falsificación, secuestro. ¿¿cuántos años te caerían?
Rosana está muy triste, su dolor no apacigua el rencor de Jorge.
--¡¡no me hagas esto.¡ --le suplica ella.
--¡¡tu no tuviste compasión de mi pero --con ironía-- para que veas que soy buena gente te informo que he descubierto que tengo un bebe de pocas semanas.
Rosana ve a un hombre cínico que se burla de las mujeres y las abandona embarazadas. Se siente usada por ese hombre. Lo mira con rencor:
--¿¿¡qué? ¡¡dejaste a otra chica embarazada¡
Él se da cuenta que ella está enojada con él y lo disfruta.
--no te tengo que dar explicaciones. --dice burlón-- mi hijo y yo nos iremos a vivir con ella y en cuanto salga nuestro divorcio nos casamos. Olvídate de mi. busca a Raúl. él calentará tu cama.
Él es muy despreciativo, ella lo abofetea ofendida.
--¡¡eres una basura.¡
Jorge y Rosana se miran con rabia.
--Pues no se qué haces aquí. Vete y no vuelvas.
Rosana se desespera.
--¡¡quiero ver a mi hijo.¡
Quiere acercarse al auto y en ese momento llega Rosa que quería parar la oreja a ver pero se encuentra con el chisme en vivo.
--¡¡llevate a esta mujer de aquí y si se resiste llama a los guardias.¡
Rosa agarra con sus brazos, con sus piernas a Rosana y no la deja moverse. Rosana llora desesperada al ver como Jorge carga las cosas en el auto y se va. Siente que no los vera mas.
--¡¡no, es mi hijo.¡ ¡¡no se lleven a mi hijo.¡
A Eugenio le duele mucho el sufrimiento de Rosana pero ve a su hermano tan molesto que no se atreve a decir nada. Rosana está hecha prisionera de Rosa.
--¡¡es mi hijo. no me haga esto¡ --le ruega a la mucama.
--No me lo haga usted señora, que me corren y yo estoy feliz de atender este casa en donde hay puro macho.
Cuando ya el auto se va, Rosa la suelta. Rosana cae sobre la hierba llorando.
--es una pena que haya perdido al señor Jorge. esta reguapo --dice la mucama excitada.
Rosana esta deshecha.
Cuando ya se han alejado, Eugenio que esta detrás con el bebe se anima a decir a su hermano:
--no crees que te ha pasado con Rosana.?
--hagamos una cosa yo no me meto en tu vida y tu no lo hagas en mi vida. --serio.
--creo que te estás equivocando. Ella es.
Jorge grita:
--¡¡Ella no es nada y si me estoy equivocando yo creo lo mismo de ti pero te respecto.¡
Jorge está muy enojado y Eugenio se queda triste. No se quiere pelear con su hermano pero lo que más le duele es verlo triste. Eugenio se calla. Jorge golpea el volante con rabia. No se puede sacar a Rosana ni de su cabeza ni de su corazón.
--tranquilo, a ver si vamos a tener un accidente. Piensa en tus hijos. --le suplica Eugenio.
Jorge resopla para relajarse.
--Si mi hijo y Lourdes son lo único que me tiene que importar.
Ninguno de los dos dice nada durante todo el trayecto.
Angélica abre la puerta de su casa. Ahí esta Jorge con su hijo, con sus cosas. ¡¡Sí, se queda¡ ¡¡No lo ha soñado.¡ Angélica quiere agarrar a Jorgito que llora. Lourdes sólo no llora en brazos de su tía. Jorge señala a la bebita y le dice a su hermano con sentimientos obligados pues no logra sentir como suya a esa beba.
--esta es Lourdes.
--hola sobrina.
Eugenio carga a Jorgito con el que siempre ha tenido una conexión especial que no le pasa con Lourdes. Para no quedarse callado acerca a su sobrino a la niña y dice:
--Mira, tu hermanito.
A Jorge le gusta ver a esos dos niños juntos. Sus hijos aunque no se acostumbrado a la idea de tener dos hijos. Jorge deja las cosas en el piso. Angélica abraza a Jorge que deja las cosas en el piso.
--podemos instalar a nuestros hijos en la habitación pequeña y nosotros nos quedamos en la grande.
Jorge no tiene ganas de hacer planes. Presenta a su hermano. Eugenio la besa.
--esta noche vamos a mi casa, cenamos con mi madre y luego conoces a mi padre.
Angélica se siente como en una nube.
--¿me ayudas a acostar a nuestra hija?
--si claro.
Jorge agarra a su hijo. Eugenio le hace gestos con la mirada.
--ahora vengo. adelántate tu.
Angélica lo besa. Toca a Jorgito pero llora. Acaricia a Jorge que se deja a hacer.
--no puede creer que sea verdad. que estas aquí. Es mi sueño --dice la joven.
A Jorge le emociona la manera grande en la que ella lo mira. Siente que no la puede defraudar. Eugenio siente desconfianza. Cuando Angélica desaparece por el dormitorio Eugenio lleva a su hermano hacia la puerta y le dice flojo (Angélica trata de escuchar pero no se oye).
--no te estás precipitando? Además. Angélica tiene algo que no me gusta.
--porque, es muy linda y me ama. Yo creo que…
Eugenio no le deja seguir:
--No. no es por eso.
--porque pues? --pregunta Jorge que siente que la joven es la chica más transparente del mundo y no entiende la desconfianza de su hermano.
--no se pero espera un poco antes de casarte con ella. No te dejes llevar por el odio..
--no es solo por molestar a Rosana es porque Angélica se lo merece. Nunca debí casarme con Rosana y no me lo pensé pues ahora tampoco me lo voy a pensar.
--pero.
Jorge lo mira regañón como diciéndole: no te metas.No le deja seguir. Agarra a su hijo y se adentra hacia el dormitorio. Deja a Jorgito en la cama mira a la bebe mientras duerme. Angélica lo abraza.
--no es linda nuestra hija?
Jorge fuerza una sonrisa. Angélica no deja de besar y acariciar a Jorge. Desde la puerta Eugenio los mira preocupados.
Mientras los gemelos Mendoza-Itriago están en el notario. Solo ellos asisten a la lectura. Víctor se deja llevar por la ambición. A Camilo no le importa nada.
--y dejo mucho dinero.? --pregunta Víctor ansioso.
--Todo. El señor Camilo Mendoza-Itriago es el dueño de todo el imperio que poseía Emilio de La Fuente.
Víctor casi se desmaya. Camilo llora emocionado y triste por ese amor que no pudo corresponder.
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